Honduras es un país cinco estrellas, y no solo por el número de estrellas en su bandera. Aunque en términos de agua y saneamiento tiene un buen desempeño, solo logra cuatro estrellas.
Fecha publicación: 01/07/2015
Ayer salió el último informe del Joint Monitoring Programme de las Naciones Unidas, analizando el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio en cuanto a agua y saneamiento. Honduras está entre los países estrella en cuanto a su cumplimiento de los ODM, pero solo logra cuatro estrellas:
Una primera estrella es por el aumento de cobertura en agua en zonas urbanas del 92 al 97% durante el periodo de los ODM (1990-2015). Obviamente, la cobertura ya fue alta, pero se logró superar la tasa de crecimiento de la población urbana y llegar hasta una cobertura casi universal en las áreas urbanas. Los que conocen la topografía y demografía de una ciudad como Tegucigalpa saben que esto es un gran logro.
Una segunda estrella, con franja de oro, es por el aumento en cobertura en agua en zonas rurales, desde 60 al 84%. Casi se eliminó el uso de agua de fuentes de abiertas. El crecimiento de cobertura se dio en gran parte a través de sistemas con conexiones domiciliarias, el nivel de servicio considerado el más alto, según JMP.
La tercera estrella brillante de oro se da por el logro del país en saneamiento – tanto en la zona rural como la urbana. La cobertura nacional aumentó del 48 al 83%, o sea se sobrepasó la meta con casi 10 porciento-puntos. El fecalismo abierto casi está eliminado. El contraste con el contexto global en el cual la meta de saneamiento no fue alcanzado y fecalismo abierto sigue siendo una práctica común.
Entre estos logros también es importante mencionar unos puntos críticos. El JMP ha hecho un gran esfuerzo de identificar inequidades en el acceso por quintiles de la población. La diferencia entre el acceso entre el quintil más pobre y el quintil más rico es una indicación del grado de inequidad. Y en esto Honduras no sale tan bien. Esta diferencia en por ejemplo el área rural es más grande en Honduras que en otros países con niveles de cobertura parecidos, como Camboya o Costa de Marfil. Aunque parece que este es un fenómeno común en América Latina, dado que se observa lo mismo en países como Colombia o Perú. No estrela para Honduras en este aspecto.
El informe JMP hace una reflexión sobre la evolución de la forma de monitoreo del acceso a los servicios de agua y saneamiento. Y de nuevo Honduras merece su cuarta estrella, por ser uno de los países con más bases de datos disponibles sobre acceso (más de diez). Refleja el hecho que Honduras toma el monitoreo de agua y saneamiento en serio. Ya lo sabíamos, entre otros por su liderazgo en el SIASAR, y su predecesor SIAR.
En conclusión, Honduras no solo ha podido cumplir y superar todas las metas, también tiene una buena base de información disponible para verificar estos logros. Y nos orgullece de haber sido parte del sector agua potable y saneamiento los últimos nueve años.
Implica también que el país está en buena posición de lograr la universalización de los servicios, tal como los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Es decir si se asume que el crecimiento de la cobertura sigue un padrón lineal Honduras llegaría a la cobertura total en agua y saneamiento en el año 2027, unos años antes de la meta de los ODS.
Sin embargo, requiere un mayor enfoque en reducir la desigualdad. Es entre los grupos más pobres que el desafío es más grande. Es de esperar que sobre todo sean las familias que viven en las zonas rurales dispersas y en las periferias de las ciudades principales quienes constituyen los quintiles más pobres. Por eso urge el desarrollo de programas y enfoques centrados en estos segmentos de la población, entre otros. Desde la iniciativa de Para Todos, Por Siempre, del cual IRC es uno de los socios, esperemos poder contribuir a la universalización de los servicios, entre otros desarrollando modelos de intervención centrados en los segmentos de población hasta ahora marginados, y elaborando métodos de planificación que permiten llegar a este meta. Esta será nuestro compromiso para que Honduras sea un país cinco estrellas en el informe del 2030 del JMP.
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